La Tita fue creada por Edelmiro Carlos Rhodesia en 1949 y la Rhodesia nació posteriormente, cuando la fábrica ya estaba en manos de Terrabusi. Rhodesia fue un joven empresario, pionero en la industria alimenticia argentina hacia finales de los años 40. Nació en Lobos, provincia de Buenos Aires en 1895. Edelmiro Carlos fue a la escuela primaria en Buenos Aires, por eso debió alejarse de sus padres y hermanos y hospedarse en casa de su abuela. Cerca de 1943 retorna a su Lobos natal donde conoce a una viuda quién dos años después sería su mujer, Lidia Martinez de Terrabusi.
Se especula que habria sufrido innumerables infidelidades por parte de Lidia y el anecdotario de su vida cuenta con pintorescos datos sobre esto. Valga el ejemplo de la creación de hasta hoy comercializada galletita Melba. La historia cuenta que en 1947 nace su primer y única hija, Melba, a quien Edelmiro Carlos no aprecia demasiado porque extrañamente su tez era oscura (siendo tanto él, como su mujer, de piel trigueña). Esto lleva a producir grandes conflictos y discusiones con su esposa sobre la paternidad de su hija. Posteriormente éste fue el nombre con que también se bautizó a la golosina: Melba, galletitas de chocolate con relleno sabor a limón, casi una metáfora de acidez entre la dulzura.Una tarde de 1949, Rhodesia, agobiado por el trabajo en el Liceo Militar de Lobos, decide hacer un postre casero que había aprendido a cocinar en sus años de estudiante. El postre consistía en dos galletitas dulces rellenas recubiertas con un baño de chocolate. Melba, de dos años en aquel momento, al no poder pronunciar correctamente la palabra “galletita” la nombraba “Tita”, y fue así como la preparación fue bautizada.
Meses después, Edelmiro fundó su pequeña empresa familiar de golosinas y comenzó a comercializar masivamente sus productos , Para 1955 la Tita ya era un clásico.Pero no todos veían con buenos ojos el ascenso de Rhodesia. La familia Bagley, familia productora de golosinas tradicional, sufrió increíbles
pérdidas y estuvo cerca de declararse en bancarrota. En marzo de 1956, Roberto Bagley, joven heredero de la fortuna de su familia, disparó repetidas veces sobre la espalda de Edelmiro mientras éste preparaba dulce de leche repostero. Rhodesia murió al instante. Bagley estuvo prófugo varios meses hasta que fue capturado en Holanda.
En la primavera de 1963, Lidia Martinez vendió la empresa de Rhodesia al primo de su ex marido, José Felix Terrabusi.
En honor a este mártir de la historia de los baños de chocolate, el 1 de julio de 1974 la empresa Terrabusi puso a la venta una de sus más comercializadas golosinas, “la Rhodesia“.
Hasta el momento de su fallecimiento en 1989 Lidia jamás hizo declaraciones públicas sobre el asesinato de su último marido, algo que para todos, sencillamente sigue siendo un misterio.

